“Su majestad, el Gato”
Este especial está dedicado a nuestros pequeños, amados y encantadores gatitos, pequeñas bolas de pelo que con su naturaleza delicada, observadora y respetuosa , han logrado enamorarnos, para hacernos felices por siempre.
¡A ver!, por dónde empezamos. Hay tanto que escribir sobre ellos pero trataremos de hablar sobre lo que más hemos aprendido en estos últimos 20 años, y si, es relativamente poco, porque hasta hace algunos años los gatos no era lo primero que se nos venía a la mente cuando pensábamos en una mascota, lo que si sucede con nuestros mejor amigos, los perros.
No sabíamos como llamar a este artículo pero si of fijáis, el título no pudo ser mejor y te vamos a explicar por qué.
El territorio para los gatos.
Una vez que tu pequeño amigo ingresa a tu casa nunca más será tuya. Esta se convertirá en el territorio de tu gato. El territorio es muy importante para los gatos, mucho más que para los perros.
Tu gatito sabrá analizar, identificar y clasificar cuáles son los mejores lugares para comer, dormir, jugar, compartir contigo e ir al baño, desde luego. Es muy probable que siempre busque lugares altos (de allí viene la importancia de enriquecer el espacio con gimnasios (rascadores) para gatos) en donde se sentirá seguro y logrará vigilar todos ”su dominios” como cualquier rey de la Edad Media, cuando se asomaba por la parte más alta de su castillo para observar su tesoro más preciado: su reino, ósea, tu casa, sintiéndose como el verdadero Rey de la casa.
Qué debe tener el Reino de su majestad.
A diferencia de los grandes reinos medievales, un gato pide poco en cuanto a extension del dominio pero como todo rey, es muy exigente con la comida, el aseo y por supuesto con la “invasión” de su territorio. Los que tenemos gatos sabemos mejor que nadie que son animales muy reservados como para relacionarse con los otros de su misma especie y con los humanos desconocidos. “De lo bueno, poco”, como dicen por ahí y un gato lo tiene más claro que nadie en este mundo.
Lo único que si tenemos que advertir, es que vuestra cama nunca más será vuestra. Cuando menos lo imagines, estará “desparramado” encima de ella, y se convertirá en los aposentos del rey.
Los manjares del Rey.
Aquí llegamos a un asunto que solo la realeza pura puede entender: los caprichos del Rey. Los gatos son tremendamente exquisitos con su alimentación. A diferencia de sus homólogos los perros, los gatos no comen cualquier cosa.
Podéis haberte gastado una buena suma de dinero en el pienso mas refinado de todos pero no necesariamente será del gusto de tu majestuosa bolita de pelos. Además no les gusta comer el pienso de muchos días. Es decir, debe estar “fresco”, recién servido en su comedero para que sea de su agrado.
El comedero es otro detalle que los gatos no perdonan. Te recomendamos uno de cerámica o de acero inoxidable porque así no se estropeará la comida de tu gatito, ellos tienen un paladar muy sensible a las partículas microscópicas que pueden desprender los comederos de plástico. Otro detalle importante es la forma y la profundidad del plato. Lo ideal es que sea amplio y no muy hondo para que él no roce sus bigotes con el borde ya que esto, le puede molestar mucho a su majestad.
Por último, ubica su comedero en un zona tranquila y lejos de su arenero. Los gatos son muy aseados y no les gusta sentir el olor de su popó cerca de su comida… en esto, se parecen a nosotras las personas.
Una buena bebida para acompañar una copiosa comida.
A los gatos les encanta beber agua fresca… ¡bien fresca!. En sus hábitat natural toman agua en movimiento, de algún riachuelo o lago, por ello, es importante que el agua del bebedero de tu gatito la cambies al menos dos veces al día. También podéis comprarle una fuente de agua eléctrica, solo tenéis que cambiar el filtro según las instrucciones de cada fuente para evitar la acumulación de parásitos en el agua.
Un pequeño TIP: ubicado el bebedero lejos de la comida y su arenero ya que ellos esperan un buen rato, incluso horas para beber después de alimentarse.
¡Vámonos a la conquista!
Como todo monarca al gato le gusta salir a conquistar reinos de vez en cuando, de allí viene su naturaleza exploradora y algunos gatos outdoor, algo que en Veterizonia jamás lo recomendaremos ya que la calle conlleva muchos peligros y riesgos de contraer enfermedades.
Pero bueno, sigamos. A los gatos hay que ayudarlos a satisfacer su naturaleza cazadora dándoles juguetes que simulen a sus presas con plumas y pelos. Nunca le tires el juguete en la cara a tu gatito. Cuando juegues con él, simula los movimientos de una pequeña presa, escondiéndolo debajo de una manta o moviéndolo por unos segundos y luego dejándolo quieto,
Listo para la corona.
¿Os habéis observado las orejas de tu gato?. En la base tiene unas “calvas” bastante comunes en todos sin excepción, haciendo parecer que siempre han usado corona o de lo contrario que tiene la fisonomía perfecta para ser coronados.
Pues bien, resulta que son uno de sos lugares de su real cuerpo que expide una cosa llamada Feromonas Felinas. El gato se vale de ellas para marcar su territorio, sus cosas y por supuesto… ¡a ti!
Esto lo hace con el fin de que tú y todo su entorno, huelan a él. Nosotros no lo oleremos desde luego pero ellos vaya que si, eso es lo importante ya que así sabrá que “ya eres de su propiedad”.
Vamos a darle muchos amor a los plebeyos.
Así como esas “calvas” en la base de sus orejas, los gatos tiene otras partes de su cuerpo en donde derrochan feromonas de amor y de marcación. En este infográfico te contamos las que se conocen hasta ahora.
Esto explica mucho cosas, como por ejemplo, el por qué a tu gato le encanta sobarse contra tu cuerpo, contra los muros, los muebles y las paredes de tu casa.
Un rey sin capa ni muchos lujos.
Los gatos no soportan muchos accesorios encima. Es un rey de pocos atavíos y prendas costosas y por ello, si quieres verlo vestido como un rey lo harás pasar por serios aprietos y se sentirá incómodo y malgeniado.
Esto es porque los gatos necesita acicalarse constantemente ya sea individual o en compañía de otro gato.
Como todo rey, necesita entretenimiento.
Le decimos entretenimiento o juego pero en realidad se trata de algo muy diferente y esencial para todos los gatos: la caza.
Ningún gato “juega”, ellos sólo cazan. Obsérvalo muy bien como “juega”. Fija la mirada, se concentra, se agazapa, avanza lentamente y ¡ZAS!… todo esta hecho. Le da igual si es una mosca, un juguete de plumas o ¡tu mano!… cualquiera cosilla que se mueva y que emule a una presa, se convertirá en su distracción y por lo tanto será un gatito muy feliz porque estará satisfaciendo sus instintos felinos.
Siempre limpio para que la Corte lo admire.
El aseo es otras de las cosas que el rey no perdona y va desde un baño amplio y con la arena limpia hasta el cuidado óptimo de su pelaje y de sus garritas.
Cuando el gato se acicala e muy importante que le des su espacio. Ellos son supremamente aseados pero de igual forma puedes ayudarlo a embellecerse con un cepillo especial para gatitos ya sena de pelo largo y corto.
En cuanto a las uñas una “garricure” de vez en cuando no le va mal, pero si el cortarás especial para gatos no es los una, provéele de rascadores de cartón, de fibra o cuerda para que él, muy vanidosamente haga su propio auto servicio. Los gatos rascan arañas regular el tamaño de sus uñas pero también para liberar algo de estrés, en todo caso lo ideal es que el rascador siempre esté en forma vertical para simular el tronco de los árboles en su hábitat salvaje y natural.
El arenero es un lugar sagrado para el gato y aquí seguimos con las exquisiteces del Rey Gato. Hay infinidades de tipos de arena en el mercado: en tronquitos, en serrín, de silicona, de maíz, de arcilla y cuanta clase te puedas imaginar pero aquí es donde este monarca se podrá muy exigente antes de escoger cuál es la que más le apode usar. ¿Caprichos?… mmm, no lo sabemos. Nosotros diríamos que son exigencias de todo Rey y ya está. Eso si, elige un arenero amplio y límpialo todos los días porque los gatos odian un baño sucio pudiendo ocasionar eliminaciones inadecuadas fuera de su bandeja y esto sería fatal porque puede que sea un Rey pero el popó no tiene rango ni jerarquía.
Pero el Rey, no siempre fue Rey.
Por todos estos motivos que os hemos explicado, en la actualidad el gato se ha convertido en uno de los animales preferidos para ser parte la familia pero, ¿sabéis una cosita?… no siempre fue así.
Hace cientos de años, los gatos eran catalogados de huraños, fríos, egoístas e independientes y peor aún, se les llegó a asociar con lo malo, las mascotas de las brujas y… ¡madre mía!, una barbaridad de tonterías carentes de fundamento. Por ello, mucho gatitos fueron perseguidos y asesinados injustamente pero, afortunadamente para ellos y para nosotros, eso cambió y radicalmente.
Los gatos son los animales perfectos para acompañarte toda la vida, verás que habrás tomado la mejor decisión de tu todas y la buena suerte está contigo. Solo una última recomendación más: obsérvalo y aprende mucho de él.
“Amar a las personas como se quiere a un gato, con su carácter y su independencia, sin intentar domarlo, sin intentar cambiarlo, dejarlo que se acerque cuando quiera, siendo feliz con su felicidad”.
Javier Salvago Calderón.